Es una guerra sin armas, sin destrucción, apenas visible. Se estima que desde el año 2000 hasta 2013 más de 23000 personas han muerto intentando entrar en Europa.
En sus países rotos , no existe futuro, por lo que nada pierden si pierden la vida. Por eso se embarcan en un viaje maldito hacia una tierra prometida que realmente no los quiere, reclamando el derecho a la dignidad humana.
Actualmente es imposible frenar ese empuje migratorio entre Africana y Europa. Sin embargo todos tenemos el deber de contribuir a cerrar la herida de una situación de la que somos responsables.
Y hacerlo está en nuestras manos porque ellos ya están entre nosotros, clamando silenciosamente el ser aceptados en una sociedad que los mira de soslayo.
Simplemente se trata de dedicar un poco de nuestro tiempo, de compartir unos minutos de sus vidas.
Podemos escucharles y acompañarles. Decidles, Hola ¿ cómo estas ?Cómo te llamas, . ¿ Qué necesitas ?, unas simples preguntas que posiblemente nadie les hizo en su país y que sin embargo les ayude a seguir adelante en su eterna huida.
Documentación:
1. Documental del francés Dominique Mollard, quien, tras 26 meses de trabajo, logró embarcarse en un cayuco para retratar como nunca antes se había hecho -el combate a vida o muerte- al que se enfrentan miles de africanos que buscan una vida mejor más allá de nuestras costas.
2. The Migrant files
La inmigración hacia Europa podría ser, por sus cifras, una guerra sin armas.Más de 23.000 migrantes han muerto mientras intentaban alcanzar el viejo continente entre 2000 y 2013, una cifra un 50% mayor de lo que se calculaba en las estimaciones realizadas hasta la fecha. Se trata de una media de más de 1.700 fallecimientos documentados cada año.
El dato ha sido desvelado por The Migrants Files, una investigación transeuropea en la que El Confidencial ha colaborado con otros nueve periódicos y diez periodistas de seis países del continente. El resultado de cinco meses de trabajo es la base de datos más exhaustiva sobre fallecimientos de inmigrantes indocumentados publicada hasta hoy.
A este resultado se ha llegado gracias al análisis de datos de diversas fuentes que van más allá de la escas estadísticas oficiales, elaboradas solo en pocos países europeos. El punto de partida ha sido la recopilación que realiza el periodista italiano Gabriele Del Grande a través del Observatorio Fortress Europe. Su información ha sido cruzada con la de UNITED for Intercultural Action, una ONG paraguas de las más de 550 que, en varios estados de Europa, monitorizan los flujos migratorios, y con la del proyecto PULS, de la Universidad de Helsinki, una colaboración con el Joint Research Center of the European Commission y la Agencia Europea de Control de Fronteras (Frontex).